La mirada forma parte de nuestra personalidad y es uno de nuestros mayores atractivos. Sin embargo, también es una de las que sufre antes y de una forma más pronunciado el paso de los años. Arrugas alrededor de los ojos, aparición de ojeras y caída de párpados. Pero para la cirugía estética, todo tiene solución y una blefaroplastia u operación de párpados puede ser uno de los tratamientos más efectivos.
Con el paso de los años, la piel de nuestros párpados sucumbe ante la incontestable ley de la gravedad y termina cediendo poco a poco en un lento camino del que ni tan siquiera nos damos cuenta. Hasta que llega un día y vemos que nuestros párpados amenazan seriamente en servir de teloneros a nuestros ojos y empequeñecer nuestra mirada. Son cosas de la edad pero también son cosas que pueden evitarse gracias a la cirugía estética.
¿Por qué resignarse a una mirada con menos luz y más apagada de la que teníamos antes? La intervención para la corrección del exceso de piel o también llamadas bolsas de los párpados es una cirugía delicada pero sin embargo muy simple. Se trata de realizar una resección de la piel durante una operación que ocupa poco tiempo y donde el paciente, en su casa, debe tener en cuenta una serie de pautas para una buena recuperación tras una blefaroplastia u operación de párpados.
En esta recuperación tras una operación de párpados, el paciente debe por ejemplo evitar lo máximo posible pasar la manos por los párpados, forzar la vista al leer o ver la televisión, recibir calor en el rostro y, en el caso de las mujeres, maquillarse. Tras una blefaroplastia tenemos que tener en cuenta que esta parte de nuestros ojos necesita, ahora más que nunca, un mimo y un cuidado especial. Y partiendo de estos simples pero importantísimos consejos, la recuperación tras una operación de párpados continua.
Se recomienda limpiar las cicatrices con una combinación de infusión de manzanilla untada en bastoncillos de algodón. En este caso, las propiedades de la manzanilla ayudarán a que éstas cicatrices terminen desapareciendo y curándose lo antes posible. Y a la hora de dormir, en la recuperación tras una blefaroplastia se debe descansar con la cabeza elevada evitando girarla o ladearla, al menos durante unos días que serán fijados por el especialista.
Y, por último, proceder a una serie de masaje en el área de los párpados, sobre todo los inferiores, 48 horas después de la operación de párpados. Un masaje suave acompañado, como no, de una crema antinflamatoria evitando el contacto y la tensión con la cicatriz. Puede que quizás, hayan aparecido algunos leves edemas pero que desaparecerán a los pocos días, justo los pocos que se tardan en recuperar una mirada más fresca y juvenil.
Deja un comentario