Consenso europeo para optimizar el viaje del paciente en estética facial con toxina botulínica
En un encuentro reciente de expertos europeos en el campo de la estética facial, se han acordado una serie de pautas enfocadas en mejorar la experiencia y calidad de vida de los pacientes sometidos a tratamientos con inyecciones de toxina botulínica, un procedimiento comúnmente asociado a la reducción de líneas de expresión.
La reunión, que congregó a un panel multidisciplinario de destacados profesionales entre los que se incluyen dermatólogos, cirujanos plásticos y médicos estéticos, se estructuró en torno a un consenso que busca definir un itinerario óptimo para el tratamiento con este neurotóxico. Dicha aproximación pone énfasis en la utilización de resultados reportados por los pacientes, un factor clave para maximizar los beneficios terapéuticos de la toxina botulínica y garantizar resultados que mejoren la percepción propia y psicosocial del individuo.
El viaje del paciente es un proceso que abarca desde la fase de consulta preliminar hasta el seguimiento post-tratamiento. Dicho proceso se perfila como esencial para garantizar una experiencia satisfactoria y que cumpla con las expectativas del usuario. La jornada comienza con una fase de evaluación, donde se recogen las inquietudes y expectativas mediante cuestionarios previos a la visita. Los especialistas recalcan la importancia de utilizar cuestionarios digitales, fáciles de completar y orientados a obtener información relevante sobre el impacto psicológico de la apariencia física y la calidad de vida del paciente.
Las estrategias de tratamiento discutidas incluyen no solo la aplicación de la toxina botulínica, sino también la educación y el asesoramiento personalizado, ajustando el plan a los deseos y necesidades específicas de cada paciente. De manera particular, se resalta la necesidad de establecer un diálogo abierto y continuo que permita adaptar el tratamiento a las variaciones en las prioridades, que pueden cambiar debido a la edad o diferencias individuales como el género, la identidad de género, la raza o la etnia.
Los expertos también resaltan la importancia de administrar movimientos faciales expresivos inmediatamente después del tratamiento para favorecer la absorción del producto a nivel de la unión neuromuscular. Asimismo, la comunicación post tratamiento es vital, recomendando plataformas de mensajería instantánea para cualquier consulta que pueda surgir, fomentando así la tranquilidad y confianza en el paciente.
El seguimiento es considerado el último paso del viaje del paciente, pero no por ello menos importante. En esta fase, se efectúan encuestas de satisfacción y se comparan fotografías antes y después del tratamiento, con la intención de monitorear la evolución y efectividad del mismo a largo plazo. Se incide especialmente en agendar revisiones con aquellos pacientes que manifiesten menor grado de satisfacción, para ajustar tratamientos y satisfacer las expectativas planteadas.
En el evento se discutió también sobre la importancia de ajustar las expectativas y de comprender que cada persona tiene una visión y necesidades únicas respecto a su estética. Por tanto, los protocolos no solo deben ser técnicamente precisos, sino también sensibles a las preferencias y singularidades de cada paciente.
Esta reunión se resalta como un paso significativo en la medicina estética, al otorgar igual importancia a la voz del paciente y a la calidad de vida post tratamiento. Los profesionales de esta área continúan enfocando sus esfuerzos en lograr una conjunción entre las mejores prácticas médicas y las experiencias de los pacientes antes, durante y después de un procedimiento.
En todoestetica.com puede encontrar más información sobre las clínicas especializadas y tratamientos de estética facial. Este encuentro es un recordatorio de la importancia de elegir profesionales cualificados y centros de confianza que sigan protocolos basados en consensos de expertos con enfoques centrados en el paciente.
El estudio y las recomendaciones derivadas de este encuentro fueron financiados por Allergan Aesthetics, una compañía de AbbVie, señalando el compromiso de la industria con el avance de la medicina estética y el bienestar de los pacientes. Al mismo tiempo, se deja claro que el contenido de las recomendaciones proviene del consenso de un panel independiente de especialistas y no representa una promoción directa de productos o servicios.
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